Movernos seguros: análisis sobre los niveles de accidentabilidad en las parroquias urbanas de Cuenca

Abstract

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) alrededor de 1,25 millones de personas mueren como consecuencia de accidentes de tránsito. En su mayoría los afectados por los accidentes son los usuarios más vulnerables como los peatones, ciclistas y motociclistas. La inseguridad vial se ha vuelto un problema de salud pública que genera grandes costos económicos, sociales y emocionales, es un tema que preocupa a las autoridades nacionales y mundiales. Al país le cuesta aproximadamente $240.000 dólares cada persona que fallece a causa de estos siniestros, el monto incluye los gastos derivados del accidente más una cantidad de lo que la persona dejaría de aportar al Estado por su productividad, a este precio se le debe sumar el costo psicológico que sufren las familias afectadas. En un intento por reducir estos costos, el Ecuador ha desarrollado el Plan Nacional de Desarrollo Toda una Vida, el cual contiene objetivos y acciones que permitan reducir la mortalidad en las vías. En el Ecuador la Agencia Nacional de Tránsito registra los datos de accidentalidad en el país, los cuales indican que en el 2017 han ocurrido 28.967 siniestros, este valor, aunque ha disminuido un 4,30% en comparación con el 2016, sigue siendo muy elevado. Es por esto que todos los usuarios de la vía pública deben concientizarse sobre los efectos que los accidentes de tránsito producen, y que las autoridades realicen estudios para detectar cuales son las causas que producen esos siniestros, de manera que se implementen medidas de corrección que minimicen estas pérdidas. El motivo de realizar la presente investigación es con el fin de elevar el nivel de seguridad de las vías del cantón Cuenca mediante la detección de aquellas variables causantes de un gran número de accidentes. El trabajo realizado se desarrolló en el Cantón Cuenca, provincia del Azuay. Se analizaron los niveles de accidentalidad en cada una de las quince parroquias urbanas para posteriormente identificar y analizar puntos críticos o corredores viales donde se generan la mayor cantidad de accidentes. Para la obtención de información sobre los accidentes de tránsito que se han producido, fue fundamental contar con el apoyo de la Empresa Municipal de Tránsito y Movilidad (EMOV EP), la Agencia Nacional de Tránsito (ANT) y el Servicio Integrado de Seguridad ECU 911 quienes fueron los encargados de proveer la información necesaria para el desarrollo de la investigación. En los puntos críticos identificados se recabó información del estado de la calzada, señalización horizontal, señalización vertical y semaforización, para determinar si las causas de los accidentes corresponden al mal estado o funcionamiento de algún componente vial. Al no existir una metodología para la evaluación integral del nivel de seguridad de la una vía, se desarrolló una en el presente trabajo que permite calificar a la misma en función de la impericia de los usuarios, estado de la calzada y el estado de la señalización. Una vez detectado el problema se sugirieron cambios y/o mejoras a los mismos. El aumento de la seguridad vial mejorará las condiciones de vida de la población, minimizando accidentes y muertes, logrando que los transeúntes circulen por dichas vías con comodidad y seguridad.